Eliminación de Cables Aéreos en Potosí

Potosí, calle Bolivar con cables aéreos
Potosí, calle Bolivar con cables aéreos
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Restaurando la Belleza de una Ciudad Colonial

Potosí, una ciudad colonial situada en Bolivia, es conocida por su rica historia y su impresionante arquitectura. Sin embargo, a pesar de su encanto innegable, el panorama de esta hermosa ciudad se ve afectado por un problema común en muchas áreas urbanas: los cables aéreos. Estos cables telefónicos y eléctricos, que serpentean por las calles y se enredan en los postes, casas e iglesias coloniales, no solo afean el paisaje, sino que también estropean las fotografías y obstaculizan la preservación del patrimonio histórico. En este artículo, exploraremos la importancia de quitar los cables aéreos en una ciudad colonial como Potosí y cómo esto contribuirá a restaurar su belleza original.

Impacto visual negativo

Potosí, calle Tarija con cables aéreosPotosí, calle Tarija sin cables aéreos


Uno de los principales problemas que los cables aéreos presentan en una ciudad colonial es su impacto visual negativo. Las casas coloniales, con su arquitectura única y fachadas bien conservadas en algunos casos en el centro histórico, se ven opacadas por la presencia desordenada y poco estética de las marañas. Estos cables atraviesan calles estrechas, se entrelazan con los postes y cuelgan peligrosamente sobre las aceras. Además de arruinar la vista de los visitantes y residentes, también afectan negativamente la imagen del centro histórico, en consecuencia, el más atractivo de la ciudad colonial, desalentando potencialmente el turismo y la inversión económica.

Preservación del patrimonio histórico

Otro aspecto importante por considerar es el impacto en la preservación de ese patrimonio histórico. Potosí tiene un legado cultural invaluable, con numerosos monumentos y casonas que datan de la época colonial. Sin embargo, los cables aéreos presentan un obstáculo significativo para su adecuada conservación. Los alambres a menudo se adhieren a las estructuras, ocultando detalles arquitectónicos y dañando la integridad de los muros históricos. La eliminación de estos cables permitiría una mejor apreciación de la arquitectura colonial y facilitaría el trabajo de restauración y mantenimiento de los sitios patrimoniales.

Además de los aspectos estéticos y de preservación, la eliminación de los cables aéreos también conlleva beneficios prácticos. La instalación de infraestructuras subterráneas para los servicios eléctricos y telefónicos no solo mejoraría la apariencia de las coloniales calles, sino que también garantizaría una mayor seguridad. Los cables aéreos son propensos a daños causados por eventos climáticos extremos, como tormentas o fuertes vientos, lo que puede resultar en interrupciones del suministro eléctrico y de comunicaciones. Al trasladar los cables bajo tierra, se reduciría el riesgo de interrupciones y se proporcionaría una mayor confiabilidad en los servicios.

Potosí arco de la calle Cobija con cables aéreosPotosí arco de la calle Cobija sin cables aéreos

Riesgo de desastres y corte de servicios

Aparte de la contaminación visual, las marañas son un riesgo no solo para los ciudadanos, sino también para la distribución de diversos servicios por el mal estado del cableado y por la total falta de normativa en conexiones de planta externa. Como ejemplo; el 9 de enero de 2021, se produjo un incendio de cables en la esquina de las calles Socabaya y potosí en la ciudad de La Paz, el centro histórico de la ciudad, generando el corte temporal de servicios de telefonía y luz eléctrica. La pronta acción de los bomberos evitó un desastre.

Maraña en un poste frente al edificio de la Alcaldía de La Paz

Una inversión a largo plazo

Si bien la eliminación de los cables aéreos puede parecer una tarea desafiante, otras ciudades en el mundo han logrado hacerlo con éxito. Se han implementado proyectos de infraestructura telefónica, eléctrica y de fibra óptica subterránea en ciudades históricas como Praga, en la República Checa, y Gante, en Bélgica, con resultados notables. Estos ejemplos demuestran que la eliminación de los cables aéreos no solo es factible, sino también una inversión a largo plazo en la calidad de vida de los residentes y en la promoción del turismo. No está demás, mencionar que en muchas de estas ciudades se ha implementado como sistema de transporte masivo sostenible los trenes y tranvías eléctricos, lo que imposibilita la eliminación por completo de los cables aéreos, pero las líneas de tendido no son una maraña y están distribuidas en solo vías principales o avenidas y no en sus centros históricos.

Cableado eléctrico del sistema de trenes en Helsinki

Revitalizando el centro histórico

En conclusión, la importancia de quitar los cables aéreos en una ciudad colonial como Potosí radica en la necesidad de preservar su belleza arquitectónica e histórica. Estos cables afectan negativamente la imagen de la ciudad, estropean las fotografías y dificultan la preservación adecuada del patrimonio cultural. Además, la instalación de infraestructuras subterráneas conlleva beneficios prácticos, como una mayor seguridad y confiabilidad en los servicios. La eliminación de los cables aéreos puede ser un desafío, pero el resultado final valdrá la pena. Es hora de que Potosí se libere de los cables y restaure el esplendor de su centro colonial.

Referencias:
Ley del cableado, la lucha contra el «horror visual», ANF, 1 de junio de 2018, (URL)
La Paz empieza a retirar cables en desuso que afean su centro histórico, JORNADA, 31 de marzo 2019, (URL)
Casas antiguas soportan los tendidos eléctricos y telefónicos, OPINIÓN, 27 de febrero 2014, (URL)
Cableado en desuso: Contaminación visual y ambiental que afecta a la ciudad de Concordia, DESPERTAR ENTRERRIANO, 30 de abril 2023, (URL)
Ley de Cableado establece planes de retiro de estructuras en desuso, CONCEJO MUNICPAL DE LA PAZ, 22 de marzo 2019, (URL)
Registran incendio de una maraña de cables a una cuadra de la Casa Grande del Pueblo, ERBOL, 9 de enero 2021, (URL)
Comienza el retiro de cables en San Pedro, a la fecha son 20.000 metros en La Paz, LA RAZÓN, 30 de noviembre 2023, (URL)

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